Una perla de la historia del Tour de Francia
Los textos que les presentamos tienen ya 93 años. No parecen, a priori, la mejor recomendación de lectura previa al Tour de Francia, pero el paso del tiempo no hace más que engrandecer el valor de unas crónicas llamadas a eternizarse en el imaginario ciclista. No es un libro cualquiera y su autor, Albert Londres no fue un periodista más. Nacido en 1884, está considerado uno de los grandes corresponsales de la historia de la prensa francesa y uno de los precursores del periodismo de investigación. Cronista también de conflictos bélicos, no podía dejar pasar la oportunidad de seguir un Tour de Francia y de relatar las batallas que en ella se sucedían.
“Los forzados de la carretera. Tour de Francia 1924” es un entrañable libro de escasas 100 páginas que recoge las crónicas que escribió este periodista francés para “Le Petit Parisien”; por aquel entonces, el periódico de más tirada en Francia. Tal cual se publicaron, las crudas crónicas escritas en la carretera y que se publicaban a diario son la materia prima de este libro. La edición española se completa con numerosas notas biográficas de los participantes como pies de página y con unos anexos con la lista de participantes y clasificaciones.
El “Tour del sufrimiento” era ya un acontecimiento en Francia en 1924 y esa edición ha pasado también a la historia por su quinta etapa: la más larga de la historia del Tour: 482 km de etapa en las que el ganador necesitó 19 horas y 40 minutos. Podrían haber sido algo menos de poder descansar algo, pero no se les permitió dormir para no perder tiempo…También fue la segunda victoria del mítico Ottavio Botecchia en el Tour, un italiano cuya trágica muerte es una de las grandes leyendas de la historia del ciclismo.
Pero olvidémonos de fechas. De nombres. De distancias imposibles. Este libro demuestra que el ciclismo ha cambiado. O no tanto. “ Aceptamos el tormento, ¡pero no queremos sufrir vejaciones!” . Reivindicaciones muy actuales en palabras de Henri Pelissier. Corredores indignados con la organización, reclamaciones de medidas de seguridad urgentes, normas absurdas y conflictos con jueces, polémicas avivadas por la prensa…
Albert Londres advierte: “no es una carrera, es un acto de verdadera locura popular”. Francia enloquece, los corredores ya lo estaban. Chiflados, iluminados, locos…Pero también gigantes de la carretera, machacas de la carretera o artistas de los pedales. Desde luego, el autor no aburría a sus lectores repitiendo la palabra ciclistas en cada línea. Les llama fieras, cadáveres, muertos de frío, peregrinos supervivientes y se atreve a denominar tenebrosos a aquellos ciclistas no profesionales que pedaleaban más de noche que de día…
Con su pequeño formato y reducida extensión, esta obra publicada en España por la editorial Melusina en el 2009, es un rico aperitivo para el Tour o un delicioso postre a cualquier carrera. Suponemos que es un libro que también le encanta al actual director del Tour de Francia y periodista Christian Prudhomme. Quien sabe si aquel otro Lucien Prudhomme que terminó el Tour de 1924 en el puesto 51, a más de 30 horas de Botecchia era familiar del actual director del Tour. Nosotros nos negamos a investigarlo. Sería tan bonito que lo fuera, que queremos pensar que lo es.
(publicado originalmente en el blog Cobbles and Hills en el 2013)